Cómo puedo cultivar alfavaca (albahaca)?

Para cultivar alfavaca o albahaca, puedes seguir los siguientes pasos:

1. Elección del lugar: Busca un lugar soleado en tu jardín o balcón donde la alfavaca pueda recibir al menos 6 horas de luz solar directa al día.
2. Preparación del suelo: La alfavaca prefiere suelos ricos, bien drenados y ligeramente ácidos. Asegúrate de aflojar el suelo y eliminar las malas hierbas antes de plantar.
3. Siembra de semillas: Puedes sembrar las semillas de alfavaca directamente en el suelo o comenzar cultivándolas en macetas y luego trasplantarlas al jardín cuando tengan un tamaño adecuado. Siembras las semillas a una profundidad de aproximadamente 1 cm y las cubres ligeramente con tierra.
4. Riego: Mantén el suelo ligeramente húmedo, pero evita el exceso de agua que pueda provocar encharcamiento. Riega regularmente, preferiblemente por la mañana, y evita mojar las hojas para reducir el riesgo de enfermedades.
5. Cosecha: La alfavaca se puede cosechar una vez que las plantas hayan alcanzado una altura de aproximadamente 15 cm. Recorta las hojas más grandes y deja que las más pequeñas continúen creciendo.

Para asociar otras plantas y evitar el uso de fertilizantes y pesticidas, puedes considerar las siguientes opciones:

1. Tagetes (Tagetes spp.): Las flores de tagetes liberan compuestos que ayudan a repeler plagas como los nematodos.
2. Caléndula (Calendula officinalis): La caléndula atrae insectos beneficiosos como abejas y mariquitas, que ayudan a controlar las plagas.
3. Menta (Mentha spp.): La menta tiene un aroma fuerte que puede repeler algunas plagas. Sin embargo, ten en cuenta que la menta puede propagarse rápidamente, por lo que es mejor plantarla en macetas o en una sección separada del jardín.
4. Borraja (Borago officinalis): La borraja atrae polinizadores y, al igual que la caléndula, es una excelente opción para atraer insectos beneficiosos.

Estas son solo algunas sugerencias, pero hay muchas otras plantas asociadas que puedes considerar, dependiendo de tus necesidades y condiciones locales.

Recuerda que el monitoreo regular del jardín y la observación de posibles plagas o enfermedades te ayudarán a tomar medidas preventivas o correctivas tempranas.