Beterraba
La Beta vulgaris es una especie de planta herbácea que pertenece a la familia Amaranthaceae. Su nombre común es beterraba o remolacha, remolacha de mesa o betabel. Es ampliamente cultivada por sus raíces comestibles y también se utilizan las hojas y los tallos jóvenes como verduras.
La remolacha es una planta bienal, lo que significa que completa su ciclo de vida en dos años. Durante el primer año, la planta forma una roseta basal de hojas grandes y carnosas de color verde oscuro. En el segundo año, la planta produce una inflorescencia alta y ramificada con pequeñas flores agrupadas en racimos. Las flores pueden ser de color blanco, amarillo o rojo y son polinizadas por el viento.
Las raíces de la remolacha son de forma redonda u ovalada, y su tamaño varía dependiendo de la variedad cultivada. Pueden tener diferentes tonalidades de color, desde el rojo intenso hasta el blanco. La pulpa de la raíz es firme y crujiente, con un sabor dulce y terroso.
Existen varias especies y variedades de Beta vulgaris, pero las más conocidas son la remolacha roja (Beta vulgaris subsp. vulgaris var. rubra) y la remolacha azucarera (Beta vulgaris subsp. vulgaris var. altissima). La remolacha roja se cultiva principalmente para el consumo humano, mientras que la remolacha azucarera se utiliza en la producción de azúcar.
La remolacha es una planta muy nutritiva. Las raíces son una buena fuente de fibra, vitamina C, ácido fólico, potasio y antioxidantes. También contienen compuestos bioactivos, como los betalaines, que les proporcionan su característico color rojo. Las hojas de la remolacha son ricas en vitamina A, vitamina K, hierro y calcio.
En cuanto a los productos comerciales más conocidos, aparte de consumirse fresca en ensaladas o cocida como parte de platos principales, la remolacha se utiliza para hacer jugos, encurtidos, sopas y salsas. También se utiliza como colorante natural en alimentos y se ha empleado en la producción de azúcar.
La remolacha se puede cultivar tanto en climas templados como en climas fríos. Prefiere suelos bien drenados y fértiles, ricos en materia orgánica. Se recomienda sembrar las semillas directamente en el suelo, a una profundidad de aproximadamente 2 centímetros. La germinación suele ocurrir en unas dos semanas, y las plántulas deben espaciarse entre sí para permitir un buen desarrollo de las raíces.
Para un cultivo exitoso, la remolacha requiere de una adecuada cantidad de nutrientes en el suelo. Es especialmente importante asegurarse de que haya suficiente contenido de fósforo, potasio y nitrógeno para un crecimiento saludable. El riego regular y la eliminación de malas hierbas son también prácticas importantes para su cultivo.
En cuanto a la permacultura o agrofloresta, algunas plantas que se pueden asociar con la remolacha para reducir la necesidad de fertilizantes y pesticidas son:
- Rabanito: Al ser una planta de rápido crecimiento, puede ser sembrado junto a la remolacha y ayuda a repeler plagas como los pulgones.
- Zanahoria: Comparte características de crecimiento similares con la remolacha y no compite por los mismos nutrientes en el suelo. Además, las zanahorias también pueden ayudar a repeler algunas plagas.
- Cebolla: La cebolla puede ayudar a repeler insectos dañinos para la remolacha, como los pulgones y las moscas de la remolacha.
- Espinaca: La espinaca es una buena compañera para la remolacha, ya que su sombra ayuda a mantener el suelo fresco y húmedo, y también puede ayudar a repeler algunas plagas.
- Caléndula: Esta planta tiene propiedades repelentes de insectos y puede ser utilizada como una planta compañera para la remolacha, ayudando a protegerla de plagas.
Estas son solo algunas sugerencias, y existen muchas otras combinaciones posibles dentro del enfoque de la permacultura o agrofloresta para crear un sistema equilibrado y sustentable en el cultivo de remolachas.